Para la construcción de la Circunvalación Oeste se autorizaron tres ampliaciones del contrato original firmado con la empresa Gualtieri. Como justificación se utilizó un pedido de Jorge Obeid. La operatoria fue sugerida por el responsable del Fondo de Kuwait.
Entre noviembre de 1995 y agosto de 1996, la Dirección Provincial de Vialidad aprobó tres reajustes a la obra Avenida Circunvalación Santa Fe, adjudicada en mayo de 1994 a la empresa Victorio Américo Gualtieri. De este modo, el precio original de 16.598.442 pesos se elevó a 24.715.351 pesos, lo que representa un incremento del 48,9 %.
El primer cuadro de reajuste fue aprobado por la Resolución N° 1.627 de la D.P.V, del 20 de noviembre de 1995, cuando el organismo era conducido por Claudio Octavio Tibaldo. En el mismo se agregan al precio inicial 1.216. 429 pesos, equivalente a un incremento del 7,33 %. La modificación obedeció, según el informe de la Inspección de Obra, a la variación de algunos parámetros en el cruce de las vías del Ferrocarril Nuevo Central Argentino, a la adecuación en las dimensiones de las alcantarillas, y a las diferencias encontradas en el cómputo de algunos ítems. Este procedimiento no recibió ninguna objeción legal debido a que se encuadraba dentro de los límites establecido por la Ley de Obras Públicas.
El segundo reajuste, es el que encubre la adjudicación directa de la Segunda Sección Autopista AP01- Avenida Blas Parera. De acuerdo a la Resolución N° 1.820, firmada por Claudio Tibaldo el 30 de noviembre de 1995, el monto del contrato se eleva hasta los 24.509.012 pesos, lo que representa un incremento de 47,66 % respecto de la inversión original. Para justificar - lo que a todas luces significa una violación de la Ley de Obras Públicas - la Unidad de Proyectos de la D.P.V y la Dirección de Asuntos Jurídicos del organismo elaboraron un intrincado argumento por el cual dividen la obra en dos (componente vial y componente hidraúlico) logrando de ese modo que los incrementos se encuadren dentro de los límites que marca la Ley 5.188.
Como justificación de la ampliación, la Resolución N°1.820 señala que, “la presente gestión ha sido solicitada por la Municipalidad de Santa Fe”, por entonces a cargo del ingeniero Jorge Obeid. Dicho pedido quedó plasmado, en una nota del 18 de septiembre de 1995, en la cual el intendente de la ciudad le solicita al gobernador Carlos Reutemann, “la pronta ejecución de los trabajos del segundo tramo de la Avenida Circunvalación”, ya que dicha obra, “permitiría garantizar definitivamente la defensa de la zona oeste de la ciudad contra inundaciones, beneficiando a los vecinos de los barrios Barranquitas Oeste, San Pantaleon, Schneider, Villa Hipódromo, Cabal y Sarmiento”.
Ocho años después esos mismos barrios quedaban bajo agua, debido a que la “solución” encontrada para justificar la adjudicación directa del segundo tramo reclamado, priorizó el componente vial del proyecto y no sus declamadas virtudes de defensa contra inundaciones.
El amigo kuwaití
Todas las etapas del proyecto de la Avenida de Circunvalación de Santa Fe fueron informadas y acordadas con el Director General del Fondo de Kuwait para el Desarrollo de la Economía Arabe, Baber Al-Huamidhi. El nexo santafesino era en primera instancia, el ingeniero Guillermo Gunzel, responsable de la Unidad de Proyectos de la D.P.V. En las instancias decisivas intervenía el ministro de Hacienda, Juan Carlos Mercier o el subsecretario de Empresas, Obras y Servicios Públicos, Daniel Depetris.
En una de las comunicaciones - vía fax - del funcionario árabe con el gobierno santafesino, se plantea la posibilidad de reducir las etapas de ejecución de la obra debido a que “induce a muchas más complicaciones administrativas, demoras de tiempo, y calidad de los trabajos ejecutados posiblemente inferior”. Esta sugerencia de Baber Al-Huamidhi disparó la creatividad de Guillermo Gunzel y en poco tiempo estuvo preparada la operación de adjudicación directa del segundo tramo a Gualtieri.
Autor: Pablo Bosch para Datasantafe
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